Las velas blancas, en el ámbito de la decoración y el Feng Shui, son mucho más que un accesorio estético, pues representan una herramienta poderosa para atraer energía positiva y armonizar espacios. Al ser vistas como un "lienzo en blanco", simbolizan nuevos comienzos brindando un aire de frescura y posibilidades al ambiente donde son colocadas.
Según esta filosofía oriental, el blanco se asocia con la pureza, claridad y renovación, elementos que contribuyen a la creación de un entorno equilibrado y sereno. Las velas blancas, integradas al elemento fuego, proyectan una energía transformadora y dinámica capaz de disipar bloqueos y mejorar la atmósfera general de una habitación. Al encender una vela blanca, se introduce una luz suave que ilumina y clarifica, promoviendo un espacio de paz y equilibrio.
Cómo incorporar las velas blancas en la decoración de tu hogar
- Centros de mesa: colocar velas blancas en candelabros elegantes sobre una mesa central ayuda a crear un punto de calma visual, perfecto para zonas de reunión.
- Estantes y repisas: agrupar velas blancas en diferentes alturas sobre estantes añade un toque de armonía y elegancia al espacio.
- Baños y dormitorios: la luz cálida de las velas blancas en estas áreas fomenta la relajación, ideal para un ambiente de descanso y meditación.
En Feng Shui, ciertos sectores de la casa están vinculados con aspectos específicos de la vida, como la salud y la prosperidad. Colocar velas blancas en puntos estratégicos del hogar puede potenciar la energía de esos sectores, amplificando sus beneficios. Por ejemplo, en la zona de la abundancia (sureste), una vela blanca contribuye a reforzar las energías de prosperidad; mientras que en la zona de la salud (centro), su presencia favorece el equilibrio y bienestar familiar.
¿Cómo seleccionar y ubicar velas blancas en el hogar?
Elige velas blancas de cera natural, como las de abeja o soja, para obtener un producto más puro y menos contaminante. La ubicación también es fundamental: disponlas a diferentes alturas y orientadas hacia el interior de las habitaciones para mantener un flujo de energía que favorezca la paz y la claridad en el hogar.