Las tendencias en la jardinería se amplían con el pasar de los años. Hoy lo que destacan son los kokedamas, un método que reformula la decoración de las plantas dentro del hogar.
El método en cuestión es oriundo de Japón y significa bola de musgo, puesto que en su creación se usa dicho elemento para conservar la humedad del sustrato del vegetal.
En ese sentido, los conocedores de la materia destacan que, para las decoraciones de interiores, usar un kokedama con plantas es la mejor opción porque es práctico, llamativo y fácil de transportar.
Elementos a usar para hacer un kokedama
- Hilo de cáñamo (o cualquier otro hilo de preferencia).
- Cuerda (la de preferencia).
- Agua.
- Arnés.
- Musgo o fibra de coco.
- Maya tejida (puede ser una red para frutas o algo similar).
- Tierra.
- Cuenco.
- Bolsa de plástico.
Cómo hacer el kokedama
- Corta la bolsa de plástico por la mitad para que puedas extenderla sobre una mesa.
- En un cuenco mediano, humedece la tierra o el sustrato con el agua requerida. El punto es que la tierra quede bien húmeda, para que pueda moldearse.
- Haz una bola de tierra con el sustrato humedecido.
- Extiende un pliego de musgo por encima de la bola hasta cubrirla en su totalidad.
- Haz un agujero en la bola en donde puedas sembrar la planta.
- Aprieta la bola para que la forma de la misma no se pierda.
- Amarra de forma muy sutil (por los orificios de la red) la parte superior de la maya con el hilo de cáñamo y ajústalo hasta que este quede estable.
- Corta 3 tiras de curda con 2 metros de largo y ata el arnés correspondiente.
- Introduce las puntas por el huevo hecho por el dobladura y, en ese sentido, también ata las puntas de la cuerda.
- Luego, fija el nudo como mejor prefieras, bien sea en la parte superior o inferior.
Luego de trazar el paso a paso indicado, habrás creado el kokedama para plantas en casa con pocos elementos y en un corto lapso de tiempo.
Tal como se aprecia en la última fotografía adjuntada, el kokedama se utiliza para decorar el interior del hogar de una manera innovadora con plantas colgantes.
En este caso, los conocedores de la materia recomiendan usar plantas suculentas o, en su defecto, arbustos que no tengan un crecimiento significativo.
Cuando siembras una suculenta en un kokedama, estas no sufren porque sus raíces no suelen expandirse tanto, pero en el caso de las plantas grandes, sus raíces sí sufrirían porque el crecimiento natural se bloquearía.