Miércoles 30 de Abril 2025
TRUCOS DE LIMPIEZA

Cuida tu salud: la verdadera razón para lavar tu ropa nueva antes de estrenarla

Integrar este sencillo paso en nuestra rutina de cuidado personal puede evitar molestias innecesarias.

Escrito en ESPECTÁCULOS el

La tentación de vestir una prenda recién adquirida es fuerte, pero dermatólogos y expertos en salud pública insisten en un paso crucial, a menudo omitido: lavar la ropa nueva antes de su primer uso. Más allá de la mera limpieza, esta práctica se revela como una medida esencial para proteger nuestra piel de una serie de riesgos invisibles que acechan en los tejidos recién salidos de fábrica.

El periplo de una prenda, desde su concepción hasta llegar a nuestras manos, implica una compleja cadena de procesos que pueden dejar residuos perjudiciales. Los químicos utilizados en el tratamiento para lograr colores vibrantes y duraderos son uno de los principales focos de preocupación.

Que la alergia no te gane. Fuente: (Instagram)

Algunas personas presentan sensibilidad o alergias a ciertos componentes de estos tintes, lo que puede manifestarse en irritaciones cutáneas, erupciones pruriginosas y eccemas en las zonas de contacto con la prenda. Los tonos intensos y los materiales sintéticos suelen ser los que pueden contener mayor carga química.

Otro factor a considerar son los aprestos, sustancias que se aplican para conferir a la ropa una apariencia impecable, evitar arrugas y facilitar su manipulación durante la confección. Estos compuestos pueden incluir formaldehído, un reconocido irritante cutáneo y potencial carcinógeno en altas concentraciones. Aunque las cantidades presentes en las prendas suelen ser mínimas, incluso trazas pueden desencadenar reacciones en individuos susceptibles.

Lavar la ropa nueva actúa como una barrera protectora. Fuente: (Instagram)

La manipulación constante en almacenes, durante el transporte y en las propias tiendas introduce otro elemento de riesgo: la acumulación de gérmenes, bacterias y hongos . Si bien el riesgo de una infección grave por esta vía es bajo, para personas con piel sensible o sistemas inmunológicos debilitados, esta exposición adicional puede ser perjudicial.

Lavar la ropa nueva actúa como una barrera protectora, eliminando eficazmente la mayoría de estos residuos invisibles. Un ciclo de lavado estándar con un detergente suave es suficiente para arrastrar los químicos superficiales, los aprestos y los posibles microorganismos que puedan haber quedado adheridos a las fibras. Este simple acto reduce significativamente la probabilidad de desarrollar dermatitis de contacto y otras reacciones cutáneas.